La Ley sobre el Copyright y
el Convenio de Berna

La Ley sobre el Copyright

En la mayoría de los países, la legislación sobre los derechos de autor otorga al creador de una obra original el derecho legal automático a controlar quién puede hacer una copia de la misma. 

Aunque cada país del mundo tiene sus propias leyes de derechos de autor, la mayoría de los estados reconocen automáticamente los derechos del creador sin necesidad de registrar formalmente la obra en un organismo gubernamental.  

Sin embargo, en caso de disputa, el creador debe demostrar de forma fiable la propiedad.

Además, dado que la mayoría de los países han firmado el Convenio de Berna (tratado internacional sobre los derechos de autor para la protección de Obras Literarias, Dramáticas y Artísticas), cada Estado está obligado a reconocer automáticamente los derechos de autor de sus ciudadanos. 

Se trata de un acuerdo fundamental permitir un comercio mundial sin impedimentos, protegiendo al mismo tiempo los derechos de autor de los creadores a escala internacional.

A continuación se explica cómo funciona la legislación sobre los derechos de autor en el Reino Unido y las leyes británicas que regulan su uso. Todos los demás países signatarios del Convenio de Berna poseen leyes similares.

👉 Ley de copyright en el Reino Unido
👉 ¿Qué puede protegerse?
👉 Ley simplificada (Simplified law)
👉 Tratados internacionales sobre copyright
👉 El Copyright del hombre pobre – (The Poor Man’s Copyright)
👉 Nuestra solución

Legislación sobre copyright en el Reino Unido

En el Reino Unido, como en la mayoría de los países, no existe una oficina gubernamental oficial para el registro de obras artísticas.

En pocas palabras, la ley de derechos de autor establece que los derechos de autor son un derecho legal adquirido automáticamente que se concede directamente al autor o autores o al creador o creadores, ya sea durante el desarrollo de la obra o una vez finalizada. 

La duración de los derechos de autor de una obra literaria, dramática, musical o artística corresponde a la vida del creador, más 70 años posteriores a su muerte. Como propietario y titular de los derechos de autor de una obra, no existe obligación legal de registrarla, pero en caso de litigio, para obtener un resultado positivo a su favor, se le puede exigir que demuestre la propiedad de la obra y la fecha en que se emitió. Aquí es donde puede surgir el problema.

Demostrar que eres el creador original de la obra y la fecha de creación puede ser más difícil de lo que parece. Si creaste la obra en tu ordenador o dispositivo, ¿cómo puedes demostrarlo? Las fechas y horas del sistema en ordenadores y dispositivos pueden ser modificadas fácilmente por cualquier novato, por lo que no se trata de una prueba concluyente en caso de disputa.

En la mayoría de los países, el copyright es un derecho legal que se adquiere automáticamente, pero si no certificas tu obra creativa, estarás expuesto a los estafadores.

¿Qué puede protegerse?

En el “Copyright, Designs and Patents Act” del 1988, esto se describe de la siguiente manera:

(a) obras literarias, dramáticas, musicales o artísticas originales,

(b) grabaciones de audio, películas [o programas de radio y televisión], y

(c) la estructura tipográfica de las ediciones publicadas. 

Fuente:  http://www.legislation.gov.uk/ukpga/1988/48/part/I/chapter/I

Así que, en pocas palabras, los derechos de autor pueden cubrir objetos cotidianos como:

🎯 Diseño gráfico, pinturas, dibujos, diagramas, mapas, fotografías y proyectos
🎯 Logotipos y diseño de sitios web
🎯 Contenido del sitio web (por ejemplo, texto, fotos, vídeos, gráficos)
🎯 Canciones y letras
🎯 Música y grabaciones de audio
🎯 Películas y programas de radio y televisión
🎯 Libros, eBooks, audiolibros, copias y obras de teatro
🎯 Poemas, artículos, relatos y blogs
🎯 Esculturas, grabados, aguafuertes y litografías
🎯 Arquitectura de un edificio o maqueta de un edificio
🎯 Materiales para la formación de empresas
🎯 Estudios de mercado e informes
🎯 Programas informáticos, códigos y bases de datos

………por nombrar sólo algunos!

Ley simplificada (Simplified Law)

Lo trataremos brevemente, ya que el tema de los derechos de autor puede ser complejo, pero es importante, sobre todo en la era de Internet, cuando el material protegido por derechos de autor está a sólo “un clic” de ser robado.

Los principales estatutos británicos actualmente en vigor son:

  • Statute of Anne 1709
  • Copyright, Designs and Patents Act 1988
  • The Copyright and Rights in Databases Regulations 1997 
  • Copyright and Related Rights Regulations 2003

El estatuto “Statute of Anne” fue la primera ley británica de derechos de autor, promulgada en 1709 y que entró en vigor el 10 de abril de 1710. Este estatuto concedía por primera vez derechos exclusivos a los autores en lugar de a los editores e incluía protecciones para los consumidores de obras impresas, garantizando que los editores no pudieran controlar su uso tras la venta. También limitaba la duración de estos derechos exclusivos a 28 años, al término de los cuales todas las obras pasarían al dominio público. Generalmente se considera la primera ley de derechos de autor del mundo en su totalidad.

Durante mucho tiempo se ha creído que el copyright, un sistema de registro obligatorio antes de la publicación, como el previsto por la ley de patentes, sea más problemático de lo que vale; además, según el sistema actual del Convenio de Berna, el registro del título no es necesario en absoluto.

En cambio, el sistema inglés de registro de los derechos de autor, iniciado por el “Statute of Anne” y mantenido de una forma u otra hasta 1912, era más flexible. En virtud del Copyright Act del 1842, el registro en el Stationers’ Hall era sólo una evidencia del título y no una prueba. Además, no había obligación de registrarse a menos que se quisiera interponer una acción por infracción, en cuyo caso se consideraba suficiente registrarse antes de emitir la orden judicial (Warne v Lawrence (1886) 54 LT 371). 

A partir del “Statute of Anne”, hace casi 300 años, países como Estados Unidos han adoptado los principios básicos de la legislación inglesa sobre los derechos de autor en su sistema de copyright. Una característica esencial de la legislación estadounidense sobre derechos de autor, notablemente ausente y absolutamente necesaria en la legislación inglesa, es el concepto de registro de los derechos de autor.

En la actualidad, la legislación británica que regula los derechos de propiedad intelectual es la siguiente: Copyright, Designs and Patents Act 1988, el The Copyright and Rights in Databases Regulations 1997, y el Copyright and Related Rights Regulations 2003 (también conocida como Directiva europea sobre derechos de autor).

Tratados internacionales sobre el copyright

El convenio internacional sobre derechos de autor más influyente es el Convenio de Berna.

La OMPI (Organización Mundial de la Propiedad Intelectual) ofrece un buen resumen de sus tres principios básicos. Todos los Estados que firmen este tratado deben adherirse a estos importantes principios básicos (fuente: OMPI):

  • Las obras realizadas en uno de los Estados miembros (es decir, las obras cuyo autor es nacional de ese Estado o las obras publicadas por primera vez en ese Estado) deben gozar en cada uno de los demás Estados miembros de la misma protección que las obras de sus propios nacionales (principio de “trato nacional”).
  • La protección no debe estar condicionada al cumplimiento de ninguna formalidad (principio de protección “automática”).
  • La protección es independiente de la existencia de una protección en el país de origen de la obra (principio de “independencia” de la protección). Sin embargo, si un Estado miembro establece un plazo de protección superior al mínimo prescrito por el Convenio y la obra deja de estar protegida en el país de origen, la protección puede denegarse una vez que cesa en el país de origen. 

Aquí te ofrecemos una lista actualizada de la OMPI con los 177 Estados que la han firmado. Incluye la mayoría de los países del mundo. 

Una lista resumida de otros tratados y convenios internacionales sobre derechos de autor está disponible Aquí.

The Poor Man's Right

El antiguo sistema de verificación de la fecha del trabajo se denominaba “The Poor Man’s Copyright” (Copyright del Hombre Pobre). Consistía en imprimir o hacer una copia del propio material, meterlo en un sobre y enviárselo a sí mismo. El sello de correos del sobre serviría como prueba de la fecha y existencia de la obra en el pasado.

El problema de este método es que deberías conservar este sobre contigo durante el resto de tu vida, asegurándote de no perderlo ni dañarlo. Además, si necesitas demostrar tus derechos de autor sobre esa obra, tendrías que abrir el sobre, lo que significa que no podrás volver a utilizarlo como prueba si tienes un segundo caso de infracción de los derechos de autor. Además, los tribunales saben perfectamente que los sobres pueden ser abiertos al vapor, sustituidos con su contenido y vueltos a cerrar por cualquiera que tenga una hervidora válida. Por lo tanto, esta no es la prueba más fiable para presentar ante un tribunal y, en nuestra opinión, un método más apropiado es hacer que tu obra sea registrada formalmente por un organismo independiente, reputado y de confianza como LutinX.com. 

Desafortunadamente, en un caso de litigio sobre la titularidad de los derechos de autor, esto puede considerarse una forma poco profesional de establecer la propiedad.

En la vida cotidiana, las empresas han fracasado en sus intentos de reivindicar la propiedad por falta de pruebas de “quién fue primero”!

Nuestra Solución

Lutinx.com ha creado el “Proyecto Copyright Zone” para resolver los problemas de robo de datos y de las creaciones, utilizando la tecnología más avanzada con un estándar único para la verificación de la identidad.

Además de los derechos legales de autor de tu obra, creemos que existen derechos morales que deben ser reconocidos y, con la creación de LutinX, pretendemos reclamar estos derechos y poner fin al robo de la propiedad intelectual, creando un sistema de equidad en toda la comunidad creativa.

Con Copyright Zone, LutinX encuentra la solución al problema más importante de los derechos de autor y es un elemento de disuasión eficaz que ayuda a resolver las disputas por violación de los derechos de autor de forma rápida, sencilla y rentable. 

Al hacerte miembro y registrar tu obra con nosotros, verificamos tu identidad, marcamos la fecha y hora de tu propiedad intelectual y mostramos exactamente cuándo la recibimos, además de asignarle un número de referencia único, que prueba que la obra existía en ese momento y que fue recibida por nosotros. 

Hemos hecho que el proceso sea lo más rápido y sencillo posible, desde el registro de una cuenta, pasando por la inscripción como miembro, hasta el envío y registración de la obra en nuestra red de datosTodo el proceso es inmediato y, una vez que envíes tu obra, recibirás al instante un certificado digital por tu trabajo.